Resumen:
El objetivo del presente trabajo fue evaluar el efecto del requerimiento de respuesta sobre la procrastinación en participantes humanos. Se realizaron cuatro experimentos (y dos sub-experimentos) en los que participaron estudiantes universitarios (entre 18 y 20 años de edad; 70% mujeres y 30% hombres) que recibieron a cambio puntos extra en una asignatura escolar. El escenario experimental consistió en un escritorio sobre el que se dispuso una laptop con el software para la tarea experimental junto con distractores (excepto en el Experimento 1, en el cual los distractores se dispusieron en una mesa diferente). La tarea experimental consistió en una serie de ejercicios (100 durante fases con requerimiento de respuesta bajo y 200 durante fases con requerimiento de respuesta alto) en los cuales los participantes debían comparar por inspección visual la cantidad de puntos verdes y de puntos azules desplegados en el monitor e indicar presionando un botón (colocado en el mismo monitor) si la cantidad de puntos verdes era mayor o menor que la cantidad de puntos azules. Los distractores empleados fueron cinco revistas de cultura popular, un televisor con su respectivo control remoto, alimentos y acceso a internet con el cual se podían consultar redes sociales, revisar videos u otros contenidos de interés. Los participantes fueron expuestos a tres fases: dos con requerimiento de respuesta bajo y una con requerimiento de respuesta alto (se aplicó control por contrabalanceo). Los eventos fueron registrados con una videocámara y se contabilizó como procrastinación el tiempo invertido en los distractores hasta concluir con la tarea experimental. Los resultados de los cuatro experimentos fueron similares: aunque no se observaron efectos sistemáticos del requerimiento de respuesta alto, unos cuantos participantes (entre dos y cuatro de cada experimento) procrastinaron de manera consistente durante la mayoría de las fases. Además se observó que hubo otros participantes que no procrastinaron nunca. En cuanto al porcentaje de aciertos en la tarea, no varió según los dos perfiles de desempeño mencionados. Se discute que la procrastinación podría ajustarse a lo que en Teoría Interconductual se conoce como estilo interactivo y se sugiere que el fenómeno podría ser evaluado para determinar si se incluye o no en la taxonomía de Ribes (1990).
